México… cuando las heces valieron más que el ser humano…


México… cuando las heces valieron más que el ser humano…
Cuando uno piensa que la vida del ser humano es un principio universal prioritario sin lugar a dudas, es inevitable cuestionar el proceder, o no proceder, de las autoridades gubernamentales mexicanas con relación a la trata de personas… (Leer más)

México… cuando las heces valieron más que el ser humano…
Cuando uno piensa que la vida del ser humano es un principio universal prioritario sin lugar a dudas, es inevitable cuestionar el proceder, o no proceder, de las autoridades gubernamentales mexicanas con relación a la trata de personas.

Pareciera que existen varias agendas en este tema: la del Gobierno Federal, la de los gobiernos estatales, una más de los legisladores y otra, casi definitiva, de las autoridades de las regiones más pequeñas llamadas municipios en la República Mexicana.

Pese a contar con una de las legislaciones más avanzadas en el planeta para combatir la trata de personas, aprobada por unanimidad en la pasada LX Legislatura de la Cámara de Diputados, México aun carece de un Reglamento que haga valer la ley en la materia.

Esto favorece la impunidad a los delincuentes tratantes que operan un día sí y otro también, destruyendo todos los derechos humanos de las víctimas que someten para ser puestas a la venta hasta 50 veces diariamente.

Y no lo afirma únicamente el que esto escribe. Recientemente tanto el Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Juan Silva Meza; como el Rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), José Narro Robles; así como Mario Luis Fuentes, director del Centro de Estudios e Investigación en Desarrollo y Asistencia Social, reconocieron que en México no se ha hecho lo suficiente para prevenir y castigar la trata de personas, identificado como una nueva forma de esclavitud que vulnera gravemente los derechos más importantes de una persona como lo son su libertad y dignidad.

Por eso cuando le digo que en este tema pareciera que no hay una agenda común a favor de la vida, por parte de las autoridades gubernamentales mexicanas, me refiero a que hay hechos de gobierno y políticas públicas que ponen a la vida humana por debajo de otros programas tan diferentes como espectaculares al grado de caer en lo lúdico.

¿O como considera usted que para algunas autoridades en México sea más peligroso y penado dejar las heces de las mascotas caninas en la calle, que vender públicamente y a la vista de todos a seres humanos que a todas luces están siendo forzadas para ser ofrecidas como auténticas esclavas sexuales?

Eso ocurre en una demarcación política, conocida como la Delegación Cuauhtémoc, en donde su titular administrativo –que no de gobierno- Alejandro Fernández, envía mensajes tan contradictorios como sorprendentes, y la justificación es que se estaría obedeciendo a peticiones ciudadanas.

El funcionario ordenó recientemente la clausura de un recinto de eventos sociales conocido como “Auditorio Blackberry”, ubicado en la popular y concurrida Colonia Condesa de la Ciudad de México, presuntamente a raíz de una queja vecinal por la afectación que provocarían las vibraciones emitidas por los conciertos que ahí se llevan a cabo. Aun cuando hay mucha confusión en torno a esto, se estaría atendiendo una petición ciudadana, lo cual es correcto.

Por el otro lado, frente a la penumbra de la noche, la misma Colonia Condesa es invadida diariamente por cientos de trasvestis que lo mismo comercian con su cuerpo que con droga; abren sus puertas giros negros en cuyo interior lo mismo se venden seres humanos que estupefacientes o alcohol adulterado. Los colonos llevan meses clamando que se haga algo. La respuesta ha sido inacción. Se estaría desatendiendo una petición ciudadana, lo cual es incorrecto.

La Cuauhtémoc está ubicada como la demarcación con el más alto índice de trata de personas con fines de explotación sexual. El propio edificio delegacional tiene como marco de recepción a sus visitantes el ejercicio forzado de la prostitución de cientos de jovencitas, lo mismo en el día que en la noche. La respuesta de Fernández desde que tomó posesión el año pasado, ha sido prometer que hará algo contra la trata, y un evento, a puerta cerrada, para anunciar más promesas, mientras que cientos de jóvenes son violentadas hasta 50 veces diariamente.

Apenas en febrero pasado, la Fundación “Día-V”, aprovechó su fuerza de 15 años de activismo internacional para movilizar más de un billón de personas alrededor del mundo, inspirando a mujeres y hombres en 207 países y 57 lugares diferentes en México, para unirse y expresar indignación contra la trata de personas y la violencia de género. México fue el país que más gente convocó en una plaza pública a bailar para esta causa, al reunir a 8 mil 200 mujeres y hombres en la plancha del Monumento a la Revolución, en el corazón de la Cuauhtémoc. Los funcionarios de la demarcación brillaron por su ausencia, pese a la presencia del Jefe de Gobierno, Miguel Mancera.

Sin embargo, a inicios de este mes el Delegado anunció una medida sobresaliente: darán hasta 72 horas de cárcel a quienes no recojan las heces de sus perros. 100 policías vigilarán que los ciudadanos cumplan la norma cívica. Ello, mientras que los delincuentes tratantes siguen operando al aire libre en la Cuauhtémoc, lo mismo en la colonia Condesa que en la Tabacalera, o en la Zona Rosa, o en la calle de Sullivan. Ningún policía ha sido destacado para preservar la vida de las jovencitas que son vendidas como objetos sexuales en las calles de esas regiones.

Parecería que el mensaje del Delegado es que en la Cuauhtémoc se escucha para algunas cosas a los ciudadanos, como las vibraciones de un auditorio, y se desatiende el estruendo vecinal que padece todos los días la prostitución forzada, el narcomenudeo y los giros negros.

Parecería que en la Delegación Cuauhtémoc, el ser humano vale menos que las heces de los perros.

Y expongo este hecho porque, precisamente al existir una Ley General Contra la Trata de Personas, sin Reglamento, cada autoridad local hace la lucha que quiere, que puede o que le dejan.

Las horas pasan, los días se suceden unos a otros, las semanas se acumulan formando pesados meses y años en la vida – o debería decir el infierno- que padecen las víctimas que aun están esperando que las autoridades de Gobierno en México despierten de su letargo y combatan efectivamente este crimen que fomenta colateralmente los delitos que más agravan a México: narcomenudeo, secuestro, piratería, corrupción, drogadicción, rompimiento y desunión familiar.

¿Por qué tiene que ser la hija de otro, la sobrina de alguien, la nieta de un tercero la que sea forzada a ser esclava sexual? ¿Se tardarían lo mismo las autoridades federales, estatales y municipales en ponerse de acuerdo para lucha contra la trata de personas, si sus hijas, sobrinas o nietas, fueran las que están siendo vendidas en los barrios mexicanos de Sullivan, La Merced, Buenavista, Tlalpan y Coyoacán?

DF sigue siendo referencia mundial

El único gobierno que está dando resultados tangibles y visibles es el de la Ciudad de México, a pesar del señor Alejandro Fernández, administrador de la Delegación Cuauhtémoc.

El Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Angel Mancera, observa disciplinadamente la pasión que le caracteriza por hacer valer la Ley pésele a quien le pese.

Además de haber diseñado personalmente el tipo penal contra la trata de personas y ser referente para ello en todo el país, el Jefe de Gobierno Mancera sigue construyendo una Ciudad de México segura, al grado que actualmente el 99 por ciento de las extorsiones telefónicas fracasan en la capital de la República Mexicana, de acuerdo a informes del Consejo de Seguridad Ciudadana del Distrito Federal.

Y recientemente, el Gobierno de la Ciudad de México lanzó un programa para combatir frontalmente la trata de personas. En el anuncio de tal esfuerzo, la Procuraduría General de Justicia del DF informó que de 2007 a 2013 registró 64 averiguaciones previas por ese delito, de las cuales 33 (más de la mitad) provienen de la Delegación Cuauhtémoc. Hasta el cierre de esta colaboración para Medios Lentos, el Gobierno de Miguel Angel Mancera había librado a 345 víctimas de este delito, de las cuales 231 son mujeres, y 219 personas fueron presentadas como presuntos responsables de trata de personas.

Ojalá todas las autoridades informaran así: ¡Cuántas vidas han rescatado, cuántas víctimas han rescatado! En lugar de dar a conocer datos numéricos tan fríos como aburridos cuando dan cuenta de tantos kilogramos de droga decomisados, autos o dinero incautados.

La líder formal de la Lucha Contra la Trata de Personas en México y la principal activista social en la materia, Rosi Orozco, recién viajó a Londres y pudo constatar que pese a sus autoridades gubernamentales, la República Mexicana está ocupando un liderazgo preponderante en el entorno mundial.

La Presidente de la Comisión Unidos vs la Trata, AC, constató la situación que viven otras sobrevivientes en Inglaterra, Alemania, Rumania y Hungría, en condiciones sumamente precarias en comparación a lo que se ha logrado en México.

Orozco ha sufrido en carne propia el embate de quienes se opone a su lucha. Por increíble que le parezca, sus atacantes están en oficinas legislativas y gubernamentales, no en las mafias que todos los días combate.

Por eso es sobresaliente que el Gobierno de la Ciudad de México esté comprometido con esta lucha, porque ha sabido comprender que rebasa cualquier ideología, partido político o doctrina. ¿De qué sirven los programas sociales si no hay gente para ser beneficiada? Porque la trata de personas acaba con la gente, con el tejido social, con los derechos humanos, con las economías.

¡La Trata acaba con la vida!

Los avances que se han tenido en México han respondido a esfuerzos de algunos legisladores valientes, de contados Gobernadores estatales como el de Coahuila, Rubén Moreira Valdés; o el de Quintana Roo, Roberto Borge Angulo.

La sociedad organizada está empujando cambios y presionando a las autoridades a que den la prioridad a los temas que le afectan en la conformación de la agenda pública.

No vamos a descansar. No queremos hacerlo.

Vamos a continuar luchando para que en México las autoridades gubernamentales publiquen el Reglamento Contra la Trata de Personas, y asignen presupuesto a este combate.

Es tiempo de volver a crecer y mejorar lo que ya se logró.

La lucha es de todos. Le invito a sumarse amable lector de Medios Lentos, a ser partícipe de esta mayoría estruendosa de ciudadanos en el mundo que insistimos en hacer y permitir lo bueno, porque a partir de ahí surge lo mejor.

Y usted es parte de ese mundo mejor, sin trata.

¡Súmese!

 

Autor
Gerardo González Acosta
info@medioslentos.com