Los muertos, las redes sociales y una revolución en Moldova


Los muertos, las redes sociales y una revolución en Moldova

Por Rafael García Palavecino¡Beep!¡Beep! Un mensaje de texto sin leer: “hy tds a la plza a drrcar al gobrn, llva bndras rumans y petrdos”; André escribió en tu muro: “Hoy todos a la plaza, ¡abajo Veronin!”. Una lluvia de mensajes en Twitter, Youtube, SMS, Facebook fueron los catalizadores de una revuelta juvenil en Moldova, un pequeño país entre Rumania y Ucrania.Las protestas que se armaron tras las elecciones legislativas en ese país, llevan a suponer que se trata de una nueva revolución de color como lo fue la revolución naranja en Ucrania o la revolución Rosa en Georgia.El denominador común que tienen estos levantamientos populares son extrañamente coincidentes: decenas de miles de jóvenes se congregan para exigir la renuncia de su gobierno de turno. El gobierno del presidente -Vladimir Veronin en este caso- es tildado de tirano y despótico, la referencia ideológica es “comunista” a secas por los medios occidentales y, claro, el campo de juego es el corredor eurasiático -o espacio pos-Sovietico- que rodea Rusia.Parecido al conflicto ruso-georgiano por la región de Ossetia del Sur, Moldova corre el riesgo de ser absorbido por Rumania, país al que pertenecía en los tiempos de la Primera Guerra Mundial; la otra es que la región de Transnistria, al este de Moldova -con fuerte densidad poblaciónal- y de rusos étnicos se independice y sea abrazada por Moscú.Aún así ¿Se puede sospechar que alguien esté detrás de una nueva revolución de color? Es muy temprano para conjeturas o teorías conspirativas.Lo que reclamó la opocisión en un primer momento fue un recuento de votos de las pasadas elecciones parlamentarias. Voronin logró casi todas las bancas -le faltó una- para controlar el Parlamento de cara a las elecciones presidenciales y aún así aceptó el recuento. A lo que la opocisión, sobre la marcha, decidió no revisar el padrón alegando que 300 mil votos fueron sufragados por difuntos. Da miedo pensar que este escenario de elecciones legislativas con zombies políticamente activos y opocisiones caprichosas -con revolución incluida- se repita en algún lado de latinoamérica en los próximos meses.Con todo, hay que tener en cuenta que la inestable región pos-Sovietica fue foco de numerosos procesos geopolíticos en los últimos años. Empezando por la guerra ruso-georgiana, en donde una Georgia claramente asistida por EEUU fue derrotada a manos de Moscú; la presión incesante de la OTAN para incorporar a Ucrania y Georgia; el anuncio de Kyrgyztán de cerrar la base aérea de Manas; son todos procesos que entorpecen el proyecto de dominio del espacio pos-Sovietico que busca el control del corredor eurasiático por parte de intereses occidentales petroleros.¿Y por qué Moldova? Es uno de los países más pobres y más densamente poblados, exporta alimentos a Moscú y tiene un sector industrial desarrollado en la provincia de Transnistria.Un nuevo régimen en Moldova -pro occidente- significaría una retirada de tropas rusas de esa provincia, para así quitarle presencia militar a Moscú en la región. Además esa hipotética Moldova sería incorporada a la OTAN vía Rumania lo cual haría avanzar a las fuerzas de los aliados más al este arrinconando a Rusia. Alfiles y Caballos cada vez más cerca del Rey.Si bien Rusia ya denunció a los servicios de inteligencia occidentales, tal acusación no puede probarse aún. Pero existen indicios que podrían demostrar la injerencia de estos departamentos a través de ONG´s y Think Tanks como por ejemplo USAID: en su sitio web, y con respecto sus actividades en Moldova, algunas de sus publicaciones tiene el nombre de «Programa de participación política ciudadana», «Fortalecimiento del activismo democrático en Moldova» y «Acceso a la Internet y programa de capacitación», es mucho más llamativo el último por tratarse de Internet la vía catalizadora de las manifestaciones.El sitio de USAID especifica que «su programa provee a las comunidades locales acceso libre y gratuito a Internet y la extensiva capacitación en todos los aspectos de tecnologías de la información». Además explica que «los grupos a los que va dirigido incluyen funcionarios de gobierno, periodistas, estudiantes, representantes locales de ONG´s, profesores y médicos…»Es un ejemplo revelador teniendo en cuenta que USAID -tanto como el NED- ha sido precursor de otras «revoluciones de color» en una región en donde el objetivo, las fichas, el tablero y el manual sigue siendo el mismo.Fuentes consultadas:-Moldova: Twitter or Color Revolutión, Prisonplanet.com, Kurt Nimmo-Moldova: «dead men voting», Aljazeera.net, Domingo 12 abril 2009-Fear Uprising, Russia Backs Moldova´s Communists, Der Spiegel, 10 abril 2009-Who is Behind Moldova´s Twitter Revolution?, Globalresearch.ca, Jose Miguel Alonso Trabanco-Unrest In Georgia, Moldova Reflects Precedent Set by Kosovo, Radioliberty.com, 10 abril 2009-Moldova has proof of Romania role in riots, The Raw Story, 10 abril 2009-La oposición moldava se niega a participar en el recuento de votos, Chisinau 14 abril 2009