La piel que habito


Hace tiempo que no escribía y necesito hacerlo, para pedir ¡Perdón!

Perdón por llevar este color de piel, que tanto daño ha hecho a los pueblos que ya existían en estas tierras cuando las vinieron a conquistar y saquear. En esos primeros viajes llegaron los presos, los más oscuros de la antigua Europa, quienes no tuvieron piedad con la cultura y patrimonio que ya existía. Arrasaron con todo, violaron a niñas, mujeres y mataron a todo aquel que se resistiera, y al los que no mataron los esclavizaron.

No siento orgullo de la piel que habito, pero es la que me tocó y les pido perdón. La verdad es que uno no elige el color, ni dónde nacer ni con quién, pero sí puede elegir qué hacer ahora y en dónde estar. Yo decido estar en la lucha.

En el que el día de hoy, 1ro de marzo de 2021, nuestro presidente de la Nación, Alberto Fernández, en la apertura del 139° período de sesiones ordinarias del Congreso de la Nación Argentina dijo: “Iniciaremos la reparación histórica de los pueblos originarios. Reconocemos todas las voces que hacen a nuestro país”.

Y hoy con enorme orgullo se suma a la web como redactora Fidelina Díaz, y siento una enorme emoción. Ella vive y nos escribe desde la comunidad de POMIS JIWET, “LUGAR DE LOS TAMBORES”, la cual se sitúa a seis kilómetros del pueblo de Santa Victoria Este, COMUNIDAD ABORIGEN CHOROTE WIKINAWOS.

Fidelina nos enseñará sobre lo que ya existía en estas tierras, y escribirá sobre su pueblo que no deja de ser el mío, el tuyo y el de todos.

Antes de que llegaran “los blancos” nuestro país estaba habitado por cientos de pueblos que aun resisten, pero que están lamentablemente en peligro de extinción si no les damos voz, si no los visibilizamos y reconocemos su historia.

Miles de niños, niñas, mujeres y hombres ya cuidaban este territorio llamado Argentina desde mucho antes de la conquista, pero el ego pudo más, la ignorancia pudo más, el no poder aprender a escuchar y tomarse un tiempo para entender lo que tenían que decirnos y enseñarnos fue más fuerte.

Llegaron navegando cargados de prejuicios y escribieron la historia no oficial, y compramos esa historia. Hoy el mundo está mal, entre muchas cosas, por no respetar y volver a las raíces, y no entender que estamos de paso y que nadie se salva solo. Como dice Jorge Drexler en unos de sus letras:

“Yo soy polvo de tu viento
Y aunque sangro de tu herida
Y cada piedra querida
Guarda mi amor más profundo
No hay una piedra en el mundo
Qué valga lo que una vida.
No hay muerto que no me duela
No hay un bando ganador
No hay nada más que dolor
Y otra vida que se vuela
La guerra es muy mala escuela
No importa el disfraz que viste”
Kabala – Jorge Drexler

Agrego que no importa más que pedir perdón, reconocer el genocidio a los pueblos originarios y decirles que desde este sitio aprenderemos de los nuestros, los originales, porque llegó su tiempo y aquí en este humilde espacio se lo daremos.

Los invito a navegar los prejuicios, a soltar los años de oscuridad y a darle luz a la única historia.

Gracias por el tiempo y que disfruten de la partida

Luciana Mazza Toimil