Cuba 50 años después


Cuba 50 años después

Por Eduardo Rodríguez Jardel *Hay cosas que comenzaron a ser reclamos en Cuba.  La mayoría de los jóvenes apoya la revolución pero pide cambios.El 1º de enero de este año la revolución cubana encabezada por Fidel Castro cumplió 50 años. En el mítico país caribeño lo celebraron escribiendo, hasta de manera casera, en negocios y casas particulares “festejamos el 50ª aniversario del triunfo de la revolución”. Hay varios triunfos en su modelo de vida desde aquella gesta libertadora del ‘59, porque hay que decirlo: realmente fueron lïbertados por Castro y sus comandancias. Era el patio trasero de los Estados Unidos. Hombres adinerados de ese país iban de timba, invertían en propiedades lujosas, esclavizaban negros –raza mayoritaria del país- y financiaban burdeles. Fidel Castro les dio libertad, dignidad, vivienda, educación (con fuerte inculcación de su modelo socialista) y salud.Este cronista y el fotógrafo que ilustra la nota visitaron las 14 provincias que integran la isla y comprobaron que no hay un ciudadano viviendo en la calle en Cuba, en todo el país. El problema habitacional en casi toda Latinoamérica es eso, un problema. Todos en Cuba tienen casa, que puede ser heredada por su descendencia. Todos tienen techo.Los cubanos comen lo que tienen. En general su dieta es limitada, no por eso no rica. Consumen vegetales, pescado, pollo y cerdo principalmente. Lácteos, arroz, huevo y frutas también son comunes; el consumo de carne de vaca está casi prohibido. Sus autos son casi todos viejos y no es fácil hacerse de uno allá. Son mayoría quienes mueren sin haber tenido jamás un auto. Pero todos han sido educados. Les gusta leer y adoran el béisbol. Allá el fútbol casi no existe.El transporte público también es bueno y es del Estado. Todo es del Estado. Los salarios son increíblemente bajos: entre 10 y 15 dólares promedio mensuales. Tienen dos monedas: una para manejo interno, que cada vez tiene menos valor llamada Moneda Nacional, y otra que entró para uso turístico pero que cada vez los obliga más a ellos a tenerla: el Cubano Convertible –más conocido como CUC o CeUCé fonéticamente-. Productos como el jabón, el shampoo y la leche se consiguen casi exclusivamente en esa moneda. Ellos cambian gran parte de su moneda nacional al otro peso, deben hacerlo. El CUC tiene más valor que el dólar y es obligatorio poseerlo para andar de paseo por la isla. Por cada dólar dan 0.80 CUC y por cada euro 1.15. A un cubano comprar 10 (diez) CUC le cuesta 250 pesos, lo que gana al mes un cubano medio…Eso, sumado al desmesurado ingreso de turistas que llegaron y llegan a la isla anualmente desde el fin de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas –lo que provocó una profunda crisis económica en Cuba- ha logrado poner en evidencia que hay cosas que comenzaron a ser reclamos. La mayoría de los jóvenes apoya la revolución pero pide cambios. Quiere tener la posibilidad de viajar, de conocer el mundo. Eso, ellos lo saben, es imposible de lograr sin buenos salarios, eso también es un reclamo. La mayoría es comunista y gusta de esa ideología. Están informados sólo por medios públicos pero no son zonzos. Casi todos te dicen que jamás se escaparían. Aman Cuba. Es realmente un país para amar. Volveríamos. Muchas veces…Fotos: Juan Peralta Martínez* Eduardo “Nacho” Rodríguez Jardel es Licenciado en Comunicación Social, Magíster en Periodismo de la Universidad de San Andrés y productor de contenidos periodísticos para televisión. Actualmente es productor del programa «Tres Poderes» y se desempeña como docente en la Escuela de Periodismo ETER.